Nunca he creído que alguien me odia
Nunca he creído que alguien me odiaaunque me hayan querido matar.Tras mis asesinos se esconde otra fuerzaque sí es mi enemiga mortal.
Todos los tipos de muerte hacen colaante mi puerta esperando su hora.El instrumento es quien cambia de rostro,pero yo sé que hay un único odio.
Sé que todas las palabrascon que le canto a la vidavienen con muerte también.Sé que el pasado me odiay que no va a perdonarmemi amor con el porvenir.
Por eso manda verdugoscon todos los uniformes.Mi asesino es el pasado,aunque con mano de hombre.
Siempre que un hombre le pega a otro hombreno es al cuerpo al que le quiere dar:en ese puño va el odio a una ideaque lo agrede, que lo hace cambiar.
Cuando lo quieto se siente movidotodo cambia de sentido.Y en la medida en que todo acelerasigue cambiando la esfera.
Siempre tendré un enemigocon el semblante arrugadoy más cansado que yo.El que al largo de su sombraquiera cortar la medidade cada revolución.
Y ya se dijo que es más grande,que el más grande de nosotros.
Y ya se dijo que se hacepara otros.