Disculpe el señor
Disculpe el señorSi le interrumpo, pero en el recibidorHay un par de pobres quePreguntan insistentemente por usted.
No piden limosnas, no...Ni venden alfombras de lana,Tampoco elefantes de ébano.Son pobres que no tienen nada de nada.
No entendí muy bienSin nada que vender o nada que perder,Pero por lo que pareceTiene usted alguna cosa que les pertenece.
¿Quiere que les diga que el señor salió...?¿Que vuelvan mañana, en horas de visita...?¿O mejor les digo como el señor dice:"Santa Rita, Rita, Rita,Lo que se da, no se quita..."?
Disculpe el señor,Se nos llenó de pobres el recibidorY no paran de llegar,Desde la retaguardia, por tierra y por mar.
Y como el señor dice que salióY tratándose de una urgencia,Me han pedido que les indique yoPor dónde se va a la despensa,
Y que Dios, se lo pagará.¿Me da las llaves o los echo? Usted veráQue mientras estamos hablandoLlegan más y más pobres y siguen llegando.
¿Quiere usted que llame a un guardia y que reviseSi tienen en regla sus papeles de pobre...?¿O mejor les digo como el señor dice:"Bien me quieres, bien te quiero,No me toques el dinero..."?
Disculpe el señorPero este asunto va de mal en peor.Vienen a millones yCuriosamente, vienen todos hacia aquí.
Traté de contenerles pero ya ve,Han dado con su paradero.Estos son los pobres de los que le hablé...Le dejo con los caballeros
Y entiéndase usted...Si no manda otra cosa, me retiraré.Si me necesita, llame...Que Dios le inspire o que Dios le ampare,Que esos no se han enteradoQue Carlos Marx está muerto y enterrado.