Puerta de caballos
Por la puerta de caballosA las cinco de la tardeAparecen las cuadrillasEntre sedas y alamaresEn la arena se quedabaUn corazón sin espadaY sus sueños enterrados, y sus sueños enterradosEn el aire de la plaza
Un torero se moríaSin más clavelones que su sangreUn torero se moríaIgual que las luces de la tardeUn torero de moríaSeñor Poderoso, te lo ruegoQue lo llames a tu ladoY nunca lo abandones en el cielo
De suspiros se llenaronLos tendidos de la plazaY una nube de pañuelosEn los rostros se parabanLos clarines se perdíanEn el dolor de la tardeY de luto se vestían, y de luto se vestíanLos colores nacionales
Un torero se moríaSin más clavelones que su sangreUn torero se moríaIgual que las luces de la tardeUn torero de moríaSeñor Poderoso, te lo ruegoQue lo llames a tu ladoY nunca lo abandones en el cielo
En el cielo